Consagración a Nuestra Señora de Lourdes
Santa María, Madre de Dios, Virgen Inmaculada,
te apareciste 18 veces a Bernadette en la gruta de Lourdes
recordar a los cristianos lo que las verdades del Evangelio exigen de ellos.
Los llamas a la oración, a la penitencia, a la Eucaristía y a la vida de la Iglesia.
Para responder a su llamada de manera más completa,
Me dedico, por ti, a tu Hijo Jesucristo.
Hazme dispuesto a aceptar lo que Él dijo.
Por el fervor de mi fe,
por la conducta de mi vida en todos sus aspectos,
por mi devoción a los enfermos,
déjame trabajar contigo en el consuelo de los que sufren
y en la reconciliación de los pueblos
para que la iglesia sea una
y haya paz en el mundo.
Todo esto te pido, confiado en que Tú, Nuestra Señora,
responderá plenamente a mi oración.
Bendita sea la Santa e Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María,
Madre de Dios. Amén.
¡Nuestra Señora de Lourdes, ruega por nosotros!
¡Santa Bernardita, ruega por nosotros!
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